
Si notas que el nivel de agua en tu piscina está bajando más rápido de lo normal, probablemente te estés preguntando: ¿es una fuga o simplemente evaporación? Hoy te voy a contar la verdad detrás de este problema tan común en verano, y te ayudaré a diferenciar entre los mitos más extendidos y la realidad que debes conocer.
Mito 1: “Es solo evaporación, no pasa nada”
Claro que el sol y el calor hacen que el agua se evapore, pero muchas personas piensan que cualquier descenso de agua es normal. La verdad es que la evaporación tiene límites. Por ejemplo, en verano puedes perder unos pocos milímetros al día, pero si notas que baja más de 1 cm en 24 horas, es momento de prestar atención.
Así que no siempre es el calor: podría haber una fuga escondida que necesita una solución antes de que se convierta en un problema mayor.

Mito 2: “Si la piscina tiene fugas, siempre las verás a simple vista”
¡Ojalá fuera tan fácil! La mayoría de las fugas en piscinas no son visibles a simple vista. Muchas veces ocurren en las tuberías subterráneas, en los skimmers o en juntas mal selladas. Por eso, aunque veas que el agua baja, puede que no veas la causa con tus propios ojos.
Mito 3: “La piscina pierde agua solo si hay grietas grandes”
Este es otro error muy común. No hace falta que haya una grieta enorme para que la piscina pierda agua. Una pequeña fisura o una junta defectuosa puede provocar pérdidas significativas. Recuerda que el agua encuentra su camino hasta por la más mínima abertura.
La importancia de detectar el problema a tiempo
Cuando hablamos de fugas en piscinas, el tiempo es clave. Cuanto más tardes en detectar el problema, más grave puede volverse. El agua que se pierde no solo afecta tu factura mensual, sino que también puede causar daños estructurales en tu piscina y en el entorno.
Pruebas simples para empezar
Si sospechas que tu piscina pierde más agua de la que debería, puedes hacer una prueba de cubo. Llena un balde con agua y colócalo en un escalón de la piscina. Marca el nivel de agua del balde y el de la piscina. Espera 24 horas y comprueba la diferencia: si la piscina pierde más agua que el balde, ¡tienes una fuga!
¿Por qué ocurren las fugas?
Las fugas pueden aparecer por varios motivos:
- Movimiento del terreno: Con el tiempo, el suelo puede asentarse y causar pequeñas grietas.
- Mal sellado: Las juntas, luces o accesorios pueden aflojarse y permitir que el agua se escape.
- Desgaste natural: El paso de los años también juega su papel, especialmente si la piscina no recibe el mantenimiento adecuado.
¿Por qué es mejor dejarlo en manos de profesionales?
Aunque puedas hacer algunas pruebas caseras, lo cierto es que detectar una fuga de verdad no siempre es fácil. Aquí es donde entra en juego la experiencia y el equipo especializado.
En Mafe Espacios, somos expertos en detectar y reparar fugas de agua en piscinas de forma rápida y eficaz. Contamos con tecnología de última generación para identificar el origen del problema sin necesidad de romper o vaciar tu piscina. Esto no solo te ahorra tiempo y dinero, sino que también evita daños mayores.

Ventajas de confiar en Mafe Espacios
Te cuento por qué nuestra empresa puede ayudarte a resolver el problema de raíz:
- Experiencia: Llevamos años en el sector, conociendo todos los trucos y técnicas para detectar fugas.
- Tecnología avanzada: Usamos equipos de ultrasonido y cámaras para encontrar la fuga sin obras innecesarias.
- Reparación eficiente: Una vez localizada la fuga, reparamos con materiales de calidad para que no vuelva a aparecer.
Además, en Mafe Espacios no solo reparamos: te asesoramos para evitar futuras fugas y cuidar mejor tu piscina. Así, podrás disfrutarla sin preocuparte por el nivel de agua o por facturas de agua disparadas.
Si estás viendo que tu piscina pierde agua y no sabes qué hacer, no lo dudes. Ponte en contacto con Mafe Espacios y deja que nuestros profesionales se encarguen de todo. ¡Verás lo fácil que es volver a disfrutar de tu piscina sin preocupaciones!